Nunca había sido tan contundente la frase “una imagen vale
más que mil palabras”, para definir una realidad como la venezolana. Las imágenes del tan esperado 23 de febrero
del presente año, quedarán para siempre, no solo en la memoria de las personas,
sino en la historia que las nuevas generaciones estudiarán de su país.
Hay una Venezuela que empezó a sacudirse tras seis años de un
régimen al que muchos están despidiendo pero no han obtenido, hasta el momento,
una respuesta en la misma dirección.
Por el contrario, las imágenes de ese domingo 23 de febrero, aumentaron
el combustible del mundo para pedir más airadamente la salida del régimen de
Maduro. Todo porque, contrario a la
esperanza del presidente interino Juan Guaidó, de sus seguidores y de la mayoría
de los venezolanos, la ayuda humanitaria
proveniente de varios países no pudo ingresar.
La indignación que produjo el no lograr que una barco
proveniente de Puerto de Rico y 14 camiones cargados con medicinas y alimentos
entraran a territorio, exacerbó más la intención nacional e internacional de
acabar con el gobierno de Nicolás Maduro.
El mundo despertó
Después de aproximadamente dos años de aislados y hasta
débiles pronunciamientos, presidentes de diferentes naciones decidieron subir
el volumen de su rechazo a la situación que vive el pueblo venezolano,
centrando su discurso en la urgencia de suplir sus necesidades básicas.
La proclamación de Juan Guaidó como presidente interino de
Venezuela, seguido del apoyo dado por el presidente de Estados Unidos Donald
Trump a esta decisión, crearon una nueva atmósfera, respecto a lo que podía ser
una salida para el pueblo venezolano.
Entonces se empezó a hablar de la ayuda humanitaria para los
venezolanos. Colombia comenzó a recibir,
organizar y almacenar ayudas. Fueron días repitiendo esta tarea, hasta que el
gran momento llegó. El presidente
colombiano Iván Duque, junto a sus homólogos de Chile Sebastián Piñera y de
Paraguay Mario Abdo, ultimaron los detalles para el envío de las 600 toneladas
de mercancía distribuida entre medicamentos y suplementos nutricionales.
Catorce camiones se vistieron de ayuda, pero no lograron
ingresar. La frontera colombo-venezolana
se convirtió en un territorio de lucha del cual 12 horas después solo quedaban
escombros en el piso. Maduro celebró
bailando con su esposa el haber hecho sentir su poder y la oposición envistió
fuerzas para decir que no iba a desistir en su intento por acabar con el
gobierno de Maduro y hacer ingresar las ayudas.
“Yankees go home”
Con estas palabras, el presidente Nicolás Maduro resumió su
discurso en el que equiparó el ingreso de ayudas con la entrada del poder de
Estados Unidos que según él quieren darle un golpe de Estado. En televisión se veían imágenes donde se
observaban seguidores vestidos de rojo quienes coreaban apoyo a su líder.
No tardaron los opositores en cuestionar dichas imágenes, por
el pasado reciente en el que en otras manifestaciones, se desvirtuó lo que se
veía en televisión, ya que no correspondía a la realidad, por ejemplo, algunos
de quienes estaban en pantalla ya no estaban en Venezuela o habrían fallecido,
según las denuncias.
Militares empezaron a
irse
El fin de semana del 23 de febrero, fue la oportunidad que un
centenar de militares aprovecharon para desertar masivamente y uno a uno,
fueron cruzando la frontera con Colombia.
Desde allí enviaban mensajes a sus compañeros para pedirles que se
unieran a ellos. En sus discursos
reiteraban que se sentían agotados por la situación, que no creían en su
comandante y por eso decidieron abandonar al régimen que defendían.
¿Qué viene ahora?
El pulso por el poder sigue en el centro del cuadrilátero.
Nicolás Maduro insiste en que repelerá cualquier acción de la oposición
mientras esta no descarta ninguna vía para echarle del poder.
Henrique Capriles una de las figuras que más representa a la
oposición ha dicho que ese gobierno deberá responderle al mundo porque lo que
ocurrió en la frontera, fuertes enfrentamientos donde además se quemaron dos
camiones con ayudas y esto según señaló, constituye una violación a los derechos humanos y en sus palabras, debe tener consecuencias.
El ex alcalde de Caracas, Antonio Ledesma y otros opositores
como María Corina Machado han pedido a Guaidó que autorice la intervención de
una coalición internacional. Hasta el momento se ve una oposición cohesionada
por la oportunidad que ven en el momento.
La Unión Europea ha pedido al régimen de Maduro que acabe con
la violencia y que deje ingresar las ayudas.
Se barajan cartas por saber si Donald Trump endurecerá aún más su
discurso y la actuación hacia Maduro.
Hasta el cierre de la presente edición se estaba a la espera
de conocer los resultados que arrojase la reunión del Grupo de Lima programada
para el pasado 25 de febrero.
Así mismo, está la expectativa por saber si más militares
desertarán, especialmente los de alto rango.
2.219 kilómetros
Pero de lo que pasa internamente en Venezuela, da cuenta de la
extensa frontera con Colombia. Son 2.219 kilómetros que representan una puerta
hacia la libertad del oprimido pueblo venezolano. Todos esperan que en este paso vuelvan a
transitar ellos cargados de mejores noticias para su futuro.
Excelente su informe sobre la crisis politica en Venezuela. Que bueno Leer de la situación política en Mexico, Nicaragua y el Salvador.